
Dicen que reír es un ejercicio donde todos los músculos del cuerpo pueden moverse; que bailar, dibujar o cantar pueden ser actividades que te llenan de placer; para otras personas estar con la familia o con un ser querido es sinónimo de dicha o gozo, sea como sea, estar japi (del inglés happy, “feliz”) es estar en manos de la felicidad.
Pero la pregunta es, ¿cómo es la felicidad en el Infonavit? Nuestra Pluma Invitada, Diana Yael Carbajal Gil de la delegación Puebla nos ayuda a responderla, a través de esta entrada que te hará que se te esponje el corazón de emoción y alegría para recordar el Día de la Felicidad, que se celebró el 20 de marzo.

SIEMPRE ES UN BUEN DÍA PARA SONREÍR
Empecemos diciendo que la felicidad es una meta humana fundamental.
Dato curioso: ¿Sabías que Bután, país en Asia, fue pionero en el reconocimiento del valor de la felicidad? Desde 1970, la Felicidad Nacional Bruta (FNB) es más prioritaria que el Producto Interno Bruto (PIB) en esa nación.
La felicidad es una condición subjetiva y relativa. Como tal, no hay requisitos para ser felices, dos personas no tienen que serlo por las mismas razones o en las mismas condiciones y circunstancias.
Es interesante saber cómo la felicidad es diferente para cada persona, ya que cada quien enfrenta diversos problemas a lo largo de su vida, y siempre una de las metas es ser feliz.
Pensando en este día, me puse a reflexionar en lo que me hace feliz o en el significado de la felicidad. Al tratar de recordarlo llegué a la conclusión de que es algo tan sencillo porque lo encontramos en las cosas o en los actos más cotidianos: un abrazo, un olor, comer nuestro postre favorito, jugar, bailar, hacer ejercicio, descansar y un largo etcétera.
Creo firmemente que todos podemos ser felices, tal vez no todo el tiempo, pero tenemos esos momentos mágicos que nos dan felicidad y que son los que recordamos siempre.
La vida es una sola y demasiado corta para que esperemos inocentemente ese momento perfecto. Creemos que la felicidad llegará de repente a nuestra vida en forma de dinero, oportunidad o persona… y no es así. Simplemente con abrazar varios instantes que nos han hecho sentir plenos obtendremos la fuerza para empezar a ser felices.
Y eso fue lo que hicimos en la delegación Puebla. Nos pusimos de acuerdo para festejar el Día de la Felicidad en las oficinas. Invitamos a las y los compañeros a escribir qué les hacía felices, les dimos un pequeño dulce y una frase respecto a la felicidad para que nunca olvidaran que siempre pueden serlo.
La primera gran sorpresa con la que nos encontramos fue que pocas personas sabían de la existencia de la celebración; segundo, vimos que para la mayoría la felicidad está en nuestra familia, y tercero, el estar feliz es una actitud y no una sensación… un elote, un abrazo o una sonrisa y podemos hacer honores al día.
Debemos disfrutar la vida y permitirnos ser felices. Pero, si en tu vida falta esa sonrisa genuina que te marca como un ser único, o que nos hace olvidar por un momento algún dolor o problema, te paso una receta que me ayuda a encontrarla cada día.
¿Has oído hablar de la dieta de la felicidad?
Todavía no hay bases científicas para confirmar una causa-efecto entre los alimentos y las emociones, pero las personas que llevan una dieta rica en alimentos fritos y procesados, cereales refinados y productos azucarados corren el riesgo de tener depresión y ansiedad; al consumir este tipo de alimentos nos animamos de forma instantánea, pero el efecto dura poco tiempo; por el contrario, quienes consumen alimentos sin procesar como verduras, frutas, carne, pescado y granos enteros tienen mejor salud mental.
Ojo, esa creencia de que el chocolate puede tranquilizarte es cierta, siempre y cuando sea amargo y consumido con moderación (estas indicaciones puedes encontrarlas en la revista American Journal Psychiatry).

Yo encuentro la felicidad en:
- Ver a mi mamá sonreír, me trae paz.
- Dibujar y pintar por horas, me transporta a mi lugar feliz y me relaja mucho.
- Los postres en general me encantan: un pan dulce, helado; las crepas provocan mi bailecito de felicidad.
- Películas de Disney, en especial La Sirenita, siempre la veo cuando quiero recordar mi infancia.
- Mirar el cielo, me trae una sensación de felicidad lo hermoso que es.

Y tú, ¿dónde encuentras la felicidad?
Te invito a buscarla en tu trabajo diario, en la atención que brindas a las y los derechohabientes, en los programas institucionales de los que has sido parte para llegar a millones de personas, en los resultados que has conseguido en tu vida profesional y en la labor social del Infonavit de la cual eres parte fundamental.
Espero que seas muy feliz en este momento, a pesar de lo que esté sucediendo contigo o a tu alrededor, ten la seguridad de que todo es un proceso continuo y todo va cambiando. Que logres dejar salir tu esencia amorosa y te permitas experimentar la felicidad por más momentos, con mayor duración y con mayor fuerza.

¿Cuál es la dieta que aplicas para encontrar la felicidad? Cuéntanos en los comentarios y no olvides mostrarnos si esta entrada te hizo feliz dándole un me gusta.
Esthela D´janira Vázquez Díaz
Felicidad es poder contemplar las maravillas que nos ofrece la naturaleza, y si es en compañía de tu kshiiiiito, es mucho mejor .
🥰💗💙🥰
Comunicación Interna
Así es, Esthela, poder compartir lo que nos ofrece la naturaleza con nuestros seres queridos, es lo máximo.
Te mandamos saludos 🙂
Damaris
Felicitaciones a Diana Yael Carbajal Gil👏🏻👏🏻👏🏻, me gustó su publicación, considero que hay varias dietas para encontrar la felicidad, una de ellas es procurar el bien común, sin olvidarnos de nosotros mismos osease también hay que procurar el bien personal
Para mi es muy satisfactorio contribuir a la felicidad ajena, generar una sonrisa en alguien es muy satisfactorio
Y en lo personal hay sonrisas que me cautivan, sonrisas que son muy agradables que alegran
a cualquier persona
Les mando un fuerte abrazo🤗 y una gran sonrisa😃
Saludos
Comunicación Interna
Gracias, Damaris, estamos seguros que a Diana le dará mucho gusto leer tu comentario.
Y tienes razón al decir que hay muchas dietas para encontrar la felicidad, lo importante es aprender a apreciarlas.
Saludos 🙂