Cuando creíamos que la emergencia sanitaria ya estaba más o menos controlada, resulta que nomás este covicho vuelve a hacer de las suyas y hasta se fue dos pasitos atrás para agarrar más fuerza, con una nueva variante y síntomas. No obstante, lo cierto es que hemos avanzado bastante porque hoy sabemos y se ha demostrado que la vacuna es efectiva para protegernos contra el COVID-19, incluso en quienes han estado enfermos; es una herramienta importante para ayudarnos a volver a la normalidad y estar seguros de que vamos a estar mejor con ella.
Así también, tenemos la seguridad de que las medidas sanitarias sí funcionan y son aliadas en el control y disminución de contagios, por ello no podemos bajar la guardia, por muy complicado o fácil que parezca.
Y te preguntarás entonces si algún día llegaremos a estar como antes de esta enfermedad. Esa respuesta quizá dependa mucho de todo lo que hagamos para que así sea, incluso quizá estaremos mucho mejor, por ello hoy nuestra pluma invitada, René Armando García Maldonado de la Coordinación General de Recaudación Fiscal en Ciudad de México, nos platica de aquello que seguramente sí podremos hacer en este periodo, ¿quieres saber de qué se trata? Adelante, te invitamos a leerlo.
Ha comenzado un nuevo año; sin embargo, tristemente la pandemia no da tregua y siguen apareciendo nuevas mutaciones, si a esto le agregamos las consecuencias no sólo físicas también mentales que esta situación está provocando, el futuro inmediato luce poco alentador. ¿Qué hacer ante este panorama? La respuesta a esta pregunta no es nada sencilla de responder porque “cada persona es un mundo” y aunque hay estudios recientes que pueden ayudar a sobrellevar esta etapa de la humanidad, no hay una receta perfecta para superar cabalmente las consecuencias que se viven en el entorno.
Hoy te comparto algo que tal vez pueda ayudar.
Por un lado, aferrarte a lo que crees, ese algo superior que te hace agradecer lo que tienes, haces, vives, sueñas. No dudar en buscar ayuda en esos momentos complicados, sobre todo a nivel emocional; es claro que no puede ser con cualquier persona; sin embargo, todos tenemos a una amiga o amigo, o un familiar que sabemos que no hace juicios (¡y si no contáctame!) a lo que le compartimos. Acércate, desahógate, no vivas tú sola o solo lo que sientes, no hay como saber que hay alguien que te escucha. Por supuesto, si ya cuentas con un profesional que te puede apoyar, no dudes en ninguna circunstancia en pedirle ayuda.
En la medida de tus posibilidades haz ejercicio, es obvio que habrá personas que te dirán que hagas toda una rutina y demás, yo pienso que aunque sean cinco minutos, pero haz algo: unas sentadillas, unas cuantas lagartijas, algo que logre sacar tus endorfinas y cambie por ese momento tu estado de ánimo. He aprendido a lo largo de este tiempo que empezar haciendo algo por un tiempo corto pero diario hará que se convierta en un hábito y tú mismo aumentarás el tiempo y el gusto por ejercitarte.
Lee, muchas personas no tienen la costumbre de hacerlo, pero busca una lectura; evita las noticias en exceso, son buenas para enterarse sobre lo que pasa en el mundo, pero no te llenes de ellas. Hay muchas lecturas y estoy seguro que alguna te puede llamar la atención y te dará un momento de imaginación, la cual es importante aunque no lo creas, porque ahí, en ese espacio, tú gobiernas, nada ni nadie lo puede cambiar excepto tú, ésa es tu zona segura en momentos complicados.
Medita, sí, sé que se lee como un estado zen tipo película, pero ¿sabías que un Padre nuestro, es una forma de meditar?, así que —como dije en un principio— comunícate de esa forma contigo mismo y en lo que creas, date esos cinco minutos de paz mental. También hay muchas aplicaciones y videos en línea que pueden ayudarte, desde dormir bien, concentrarte… en fin, de todo.
Música, escucha aquella que te anime y baila en donde estés, en la calle, en tu habitación (bueno, si estás en una reunión laboral o atendiendo a una persona, mejor al final de esta actividad, digamos que no debemos perder nuestra responsabilidad dentro de nuestro entorno laboral), pero date permiso de una buena canción que te haga tararear o mover los pies (sí, también tú que dices tener dos pies izquierdos).
Sé que se lee todo esto como algo muy positio y cualquiera de nosotros puede decir: “Estoy pasando por algo que nadie entiende”, pero créeme sé a qué te refieres, aunque parezca trillado. Alguien por ahí me dijo una vez “es un día más que te acerca a lo que tú quieres”, entonces aférrate a esto, ama lo que haces, ama a la persona que ves en el espejo y recuérdale lo importante que es para ti; eres parte de una gran familia, la familia Infonavit, que como toda familia tiene sus aristas, pero es tu familia también. En línea o presencial, recuerda que estás en una de las mejores instituciones del país y tu eres parte fundamental de ella. Gracias a ti que también eres de los mejores de la nación, es lo que es.
Que tu camino en este 2022 esté lleno de grandes cosas.
¿Qué opinas de esta reflexión? ¿Qué le contestarías a René sobre lo que escribió? Anímate a dejar tus pensamientos o a tener una conversación con nuestro compañero o con alguien más que deje sus comentarios.
Nos encantará leerte.
Israel Ocampo
Es importante tener un buen equilibrio emocional, muchas gracias por compartir esta información René, que aporta de mucha ayuda para reflexionar.
Saludos.
RODRIGO BECERRIL GARCIA
Comparto contigo tu reflexión…me es grato poder compartir mis actividades diarias todos los días sin excepción me levanto 4.30 o 5 de la mañana ejercito mi cuerpo entre 15 a 20 mts. realizo actividades de revisión y ofrecimiento de nutrientes a mis aves y ganado en mi pequeña granja posteriormente bañarme y 6.30am ya estar listo para salir de mi hogar y llegar a tiempo a mi trabajo es decir al INFONAVIT y te comparto que el premio de asistencia en mis casi 27 años de pertenecer al Instituto una sola vez no lo alcance por un retardo, esta breve reflexión y forma de vida a hecho que ni con esta pandemia dejo de ser lo que siempre e querido ser, por que recuerda: “mente sana en cuerpo sano”¡¡¡
Nora Hernández R.
Gracias Rene, por compartir, estuvo muy interesante y realmente te hace reflexionar. ya aplico algunos de tus consejos, voy por el resto.
Buen Día!!
María Teresa Herrera Moreno
Muy de acuerdo, solo agregaría entre lo que SI podemos hacer: prestar algún servicio, ayudar a alguien que necesite apoyo ya sea económico llevando alguna despensa o brindarle de nuestro tiempo que a veces es lo único que les está haciendo falta en ese momento, dar lo mejor de nosotros es algo que alimenta el alma y si oramos unos por otros ¡es maravilloso! es darnos cuenta que nos hacemos falta los unos a los otros, por algo ese ser maravilloso nos formó para vivir en comunidad.
Un abrazo cariñoso!!!
Erika Arriaga Ramírez.
Excelente reflexión, y en efecto, aun con Virus, tenemos y podemos hacer muchas cosas, afortunadamente el sol sale todos los días, nos da esperanza y nos enseña a brillar siempre.
MARÍA DOLORES RODRÍGUEZ TEPEZANO
Muy bonito su mensaje, saludos.
Mónica Arévalo Alcántara
DIOS NOS BENDICE EN TODO MOMENTO.
Comparto contigo tus comentarios, practico la meditación y el reiki, trabajo conmigo todos los días, nadie dijo que era fácil, pero en la medida que reconoces muchas cosas todo comienza a cambiar en tu enotorno
Te mando un abrazo de luz inmensa