Para muchas personas en nuestro país el día comienza hasta que pueden disfrutar su taza de café o de chocolate, o su vaso de leche con el acompañante perfecto: el pan, ya sea dulce, blanco con mantequilla o un simple bolillo. ¿Formas parte de ese grupo?
El pan es un alimento básico a nivel mundial; se tiene registro de él cerca del año 2000 a.C. como una mezcla de trigo molido y agua, posteriormente, los egipcios descubrieron la fermentación, de esa manera el pan fue más esponjoso.
Con los años se convirtió en un alimento que se podía consumir durante todo el año, pues el almacenamiento del cereal y su conservación era relativamente fácil, fue así que muchas culturas adoptaron el pan como parte de su alimentación diaria y, actualmente, tiene su reconocimiento el 16 de octubre, Día Mundial del Pan.
¿Qué hay de nuestro mexicanísimo pan?
De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa), el inicio de la industria panadera en México data de 1524. Con el paso del tiempo fue integrándose a la alimentación diaria de la cultura mexicana gracias a su bajo precio y su gran valor nutricional en la dieta diaria.
Y como era de esperarse, la creatividad e ingenio popular mexicano lograron crear infinidad de variedades y nombres de panes, ya sea salados o dulces.
Besos, ojos de buey, campechanas, cochinitos de piloncillo, piedras, picones, garibaldis, tlaxcales, rejas, pambazos, cemitas, chilindrinas, borrachos, pan de muerto, pan de pulque son algunos de los panes que se han ido creando a lo largo del país.
En la actualidad, algunas panaderías han inventado sus propias versiones de pan con peculiares rasgos, lo que ha dado como resultado algunas creaciones culinarias especiales, tales como:
Sabemos que en ocasiones ingerir pan dulce puede resultar casi adictivo y esto es debido a que la combinación de harinas refinadas, azúcares (en su mayoría simples) y grasas produce un alimento alto en sabor, lo que provoca un placer muy grande al comerlo.
Si bien estas deliciosas piezas de pan pueden ser un festín para nuestra boca y estómago, es importante recordar que su consumo excesivo puede ser dañino para la salud. Recuerda: todo con medida.
¿Se te antojó alguna de estas creaciones?, ¿conoces otra?, cuéntanos en los comentarios en dónde podemos conseguirla.
Edna Irene González Rubio Acosta
La Panadería El Boleo, más que una panadería, es parte de la historia del pueblo de Santa Rosalía. Bautizada con el mismo nombre que la empresa francesa que explotó los yacimientos de cobre en la región, desde 1901 sus mismos hornos han trabajado más de 100 años para ofrecernos un exquisito pan francés; Bolillo, conchitas, empanadas, telera, virote, en fin, ya sea que optes por dulce, salado o ambos, sin embargo el más buscado en todo el Estado es la Pitaya, llamado así por su forma como el fruto y sin duda alguna el más rico de todos los panes en B.C.S.
Comunicación Interna
Edna, la historia que compartes de la panadería El Boleo es muy interesante; y con con tu descripción de los panes ya se nos antojó probar una pitaya.
Saludos.
Alejandro Hernández García
En la ciudad de México y sus alrededores hay varias panaderías que son muy emblemáticas como lo son la panadería La Ideal, La Madrid, La esperanza, El Globo, La flor de México, La Vasconia, El Molino, entre algunas más que ya no están en operación pero no dejan de ser parte de la historia de la Ciudad.
Comunicación Interna
Tienes razón Alejandro, todas estas panaderías emblemáticas fueron y algunas siguen siendo parte de nuestros días.
Las meriendas con café o chocolate y un delicioso pan, son memorables.
Saludos.